Imagino que durante el acto de defecar algunos de ustedes habrán pasado por la desagradable experiencia de mojarse el ano con el agua fétida que se desplaza verticalmente al caer la materia fecal.
Todos, aunque sea de manera intuitiva, hicimos uso de alguna original técnica para evitar el efecto chofff. He aquí un resumen de algunas de ellas encontradas en las páginas de utilidad pública de
Internet:
1- Primera técnica: posicionar el ano lo más próximo posible a la tapa del inodoro, quedando por tanto el escroto (en el caso del hombre) totalmente aplastado contra la misma. Así el mantecado bajará lentamente por la cerámica. Al producirse el efecto amortiguador en la caída el senegalés maloliente no provocará el referido efecto chofff.
Problemas:
a) La mierda deja un rastro casi indeleble en la cerámica. En caso de ser hombre no se preocupe, afortunadamente no es el macho el encargado de limpiar el inodoro de cada casa. A lo sumo intente deshacer el surco pastoso con diversos chorros de orina a alta presión. No obstante cabe la posibilidad de que la tostada puede comenzar a oler más tarde, y en caso de dejar el regalito en casa de la novia o de los suegros puede considerarse cuando menos de dudoso gusto.
b) En caso de falta de puntería el pepino puede rozar la tapa del inodoro y causar un auténtico desastre. En este caso se recomienda encarecidamente limpiar la misma tras la faena, ya que en la siguiente cagada se corre el riesgo de olvidar completamente lo sucedido y ensuciarse las pelotas con la propia mierda.
2- Segunda técnica: crear una alfombra flotante compuesta por papel higiénico Conocida como efecto hovercraft, esta técnica parte de la máxima de que la mierda siempre será amortiguada al golpear la alfombra evitando así el efecto choff.
Problemas:
a) Error en la cantidad utilizada de papel por defecto. En este caso el agua golpeará el anillo de cuero de cualquier manera.
b) Error en la cantidad utilizada de papel por exceso. Aquí sin embargo el inodoro se atasca, y el sujeto cagador pasa por la vergonzante experiencia de tener que huir apresuradamente del agua con mierda que sube amenazadoramente por las paredes del inodoro.
3- Tercera técnica: más conocida como cag'n'run o cague y corra en su traducción al castellano Consiste en defecar normalmente en el centro del inodoro y desplazar el culo rápidamente hacia un lugar donde el chorro putrefacto no alcance el ojete. Esta técnica necesita muchos reflejos, explosión muscular y una coordinación motora cuando menos razonable.
Problemas:
a )Arrancar lentamente: en este caso el agua infecta anegará indefectiblemente su objetivo.
b) Arrancar demasiado rápido: en este caso se corre el riesgo de apartar la sentadera del trono incluso antes de que el puro se haya desprendido íntegramente del ojete. Resultado: mierda en tapa del inodoro en la parte de atrás del muslo o lo que es incluso peor, dentro de los calzoncillos del sujeto cagador. Asimismo, es necesario destacar un curioso fenómeno durante el uso de esta técnica. El defecante puede ser sorprendido durante su faena por el conocido como el sorete espía, que es aquel que permanece pegado a la superficie anal después de que el sujeto alcance la convicción de que se ha desprendido íntegramente de las heces.
La tragedia se confirma cuando dicha variedad de excremento cae inevitablemente sobre el calzoncillo o en el suelo.